El santo padre estuvo este  miércoles con dos jóvenes cristianas de Nigeria, víctimas de la persecución yihadista.

Con motivo de los 10 años del pontificado del papa Francisco, la fundación pontificia Aid to the Church in Need (ACN) quiere destacar la cercanía del santo padre con los cristianos que sufren y son perseguidos en el mundo, así como su especial interés por el diálogo interreligioso y la defensa de la libertad religiosa.

«Su presencia ha sido cercana y llena de detalles significativos. Extremadamente atenta ha sido también su atención por nuestro trabajo en ACN. Recordamos con agradecimiento momentos como cuando en 2018 recibió a nuestra institución junto con Rebeca Bitrus, cristiana nigeriana perseguida por Boko Haram con una historia terrible de violaciones y sufrimientos», afirma Thomas Heine-Geldern, presidente ejecutivo internacional de ACN. «Este miércoles, ocho de marzo, Francisco saludó después de la audiencia general a dos jóvenes que también han sufrido muchísimo bajo la violencia terrorista islámica en el norte de Nigeria».

«Como no recordar también sus palabras de apoyo a la familia de Asia Bibi para que transmitieran su cariño y su apoyo a esta mujer pakistaní que estuvo en prisión diez años acusada falsamente de blasfemia», destaca Heine-Geldern.

Ejemplos concretos de la preocupación del Papa por los perseguidos por la fe son dos de los vídeos mensuales del santo padre con intenciones de oración. En 2017 y 2019 pedía que los cristianos perseguidos sean sostenidos con la oración y la ayuda material de toda la Iglesia. En enero de 2022, calificaba la persecución religiosa de “inaceptable e inhumana” y “una locura”.

Visitas a los cristianos que sufren en países olvidados

Sus visitas a países como la República Democrática del Congo, Sudán del Sur, la República Centroafricana, Kazajistán o Irak son un testimonio y una herencia del santo padre, que escucha y va al encuentro de la Iglesia que sufre, de los más olvidados y sedientos de paz y justicia. En Irak, Francisco pisó iglesias que fueron destruidas por Daesh y visitó al gran ayatolá al-Sistani, un gesto que algunos reconocen como un «hito en el camino del diálogo interreligioso».

A través de distintos gestos, el sucesor de Pedro ha mostrado su cercanía con ACN y su labor. En 2017, invitaba a hacer obras de misericordia junto a la fundación pontificia en la campaña «Sé la misericordia de Dios«. En varias ocasiones ha recordado, así mismo, la iniciativa de ACN “Un millón de niños rezan el rosario” para rezar por la paz en el mundo.

«Yo mismo he sido testigo de esos momentos de gran cercanía del papa Francisco con nuestros hermanos y hermanas que sufren, como cuando el santo padre bendijo un icono de Nuestra Señora de los Dolores de Siria y rosarios para rezar por la paz en Siria». Desde su balcón, bendijo 6.000 rosarios que ACN envió a familias de Siria que habían perdido a seres queridos por  la guerra, la violencia y el terror.

Defensa de la libertad religiosa

Por otra parte, la fundación recuerda con agradecimiento que el santo padre ha dejado también testimonios hablados y escritos para recalcar la importancia de la libertad religiosa. El último de ellos, muy reciente, en enero de 2023, cuando habló al cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede sobre la importancia de defender la libertad religiosa para una verdadera paz en el mundo.

«Nos sentimos especialmente agradecidos del análisis que el santo padre hace de los tiempos que estamos viviendo, donde en muchos países del mundo se da también una persecución educada, escondida a los cristianos; no sembrada por el terror y la violencia terrorista sino por la falta de respeto a la conciencia de la persona humana y la coacción a vivir en contra de los valores morales y de lo sagrado», concluyó Heine-Geldern.

El sumo pontífice ha hecho alusión en varias oportunidades al derecho a la libertad religiosa. Una de esas ocasiones fue el 2014, durante el rezo del ángelus en la plaza de San Pedro, cuando dijo que el sacrificio de los actuales «mártires», perseguidos por ser cristianos, refuerce el empeño para asegurar la libertad religiosa en todo el mundo.  Más recientemente, en su viaje a Kazajistán donde participó en el Congreso de Líderes de Religiones Mundiales y Tradicionales. Allí precisó: es un derecho de toda persona dar testimonio público de la propia fe, proponerla sin imponerla nunca.