Desde tiempos inmemoriales, la Iglesia conoce la tradición de los estipendios de Misa, a saber, el encargo a los sacerdotes por parte de los fieles de una Santa Misa por determinadas intenciones a cambio de dinero u otros pequeños donativos. Pero aquí no se trata de ‘pagar’ la Santa Misa, pues eso no es posible, sino de un signo de gratitud y amor. Para muchos sacerdotes, especialmente en los países más pobres, ello supone una contribución indispensable a su sustento, porque a menudo no reciben un salario. Al mismo tiempo, es una gran muestra de amor que se celebre una Santa Misa por los vivos o los difuntos: es lo más grande que puede regalarse a una persona.

El año pasado pudimos distribuir casi 1,9 millones de estipendios de Misa entre 40.730 sacerdotes necesitados de todas las partes del mundo, y también quince Padres Espiritanos de México nos dan las gracias por 300 estipendios de Misa. La orden depende de este dinero para pagar, entre otras cosas, los tratamientos médicos necesarios de sus miembros, procedentes de diferentes países.

El padre Obiang Edou Yannick, originario de África, nos escribe: “Con alegría y gratitud queremos dar las gracias a AYUDA A LA IGLESIA NECESITADA por su apoyo y por la importancia que le da a nuestra misión de primera evangelización entre los pueblos mexicanos de los téneks y náhuatls. Gracias a vuestro apoyo, hemos podido superar algunas de nuestras dificultades. Que Dios os bendiga y que la misión de Cristo llegue hasta los confines de la tierra”.

Y también uno de sus compañeros, el P. Baltazar Hernández, expresa su gratitud en nombre de todos sus hermanos: “¡Que la gracia, el amor y la paz estén con vosotros! Con gran gratitud me dirijo a AYUDA A LA IGLESIA NECESITADA para agradeceros vuestro apoyo a través de las intenciones de Misa en 2022. Mil gracias por esta generosa ayuda que nos anima a continuar nuestra labor misionera al lado de los más necesitados… Que Dios os colme de bendiciones en vuestra labor de ayuda a los que menos tienen”.

También este año, muchos miles de sacerdotes necesitados están deseando recibir vuestras intenciones de Misa.