Un grupo de hombres armados ha perseguido y asesinado a un sacerdote de la Iglesia anglicana de Pakistán (Church of Pakistan) cuando regresaba a su casa después de celebrar el culto dominical en la ciudad de Peshawar, al noroeste del país. Otros dos clérigos que viajaban en el mismo coche también han sido atacados, uno ha resultado herido y el otro ileso. Este pasado fin de semana también ha sido asesinado un sacerdote católico en Vietnam, mientras estaba confesando en el templo.
Según informaciones de agencias y de la policía local, este domingo 30 de enero el reverendo William Siraj, de 75 años, “recibió múltiples disparos y murió instantáneamente en una emboscada en el vecindario de Gulbahar, en Peshawar, mientras que el sacerdote Naeem Patrick fue tratado brevemente en el hospital por una herida de bala en la mano”.
De momento, ningún grupo ha asumido la responsabilidad de este ataque y la policía sigue investigando el caso. En Pakistán, más del 95% de los habitantes son musulmanes y los cristianos son una minoría del 2%, muy amenazada por los grupos yihadistas y talibanes. Es común que comunidades cristianas sean amenazadas y atacadas por extremistas musulmanes.
Según el último Informe de Libertad Religiosa en el Mundo de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), junto a China e India, Pakistán es uno de los países más poblados del mundo donde se producen graves violaciones de la libertad religiosa a causa del extremismo islamista. Entre ellas están las detenciones forzosas, las acusaciones de blasfemia que son castigadas con pena de muerte, los secuestros, conversiones y matrimonios forzados de mujeres menores de edad y el ataque de iglesias, entre otros.
Sacerdote católico asesinado en Vietnam
El sacerdote dominico Joseph Tran Ngoc Thanh fue asesinado a puñaladas el sábado 29 de enero mientras impartía la Confesión en una iglesia en la ciudad de Dak Mot, ubicada en el municipio vietnamita de Kontum.
La Orden de Predicadores, o Dominicos, ha dado a conocer los hechos, que se produjeron instantes antes de la celebración de la Misa, “Esta es la muerte más grave de un sacerdote desde la guerra de Vietnam”. Otro religioso dominico, que acudió al lugar de los hechos, resultó herido mientras intentaba detener al agresor.
El padre Tran, fue traladado al hospital pero finalmente falleció debido a las graves heridas. La policía local ha detenido al agresor, que ha sido considerado como una persona “con enfermedad mental”. La comunidad local está profundamente conmocionada por el inesperado asesinato del sacerdote, justo cuando se preparaban para las celebraciones del Año Nuevo Lunar, que Vietnam celebra el 1 de febrero.
La nobleza del sacerdote
El sacerdote había asumido recientemente su cargo a la atención pastoral de una pequeña comunidad de católicos. El obispo Aloisio Nguyen Hung Vi, de la diócesis de Kon Tum, celebró el pasado domingo una misa de funeral y expresó sus condolencias a la comunidad parroquial de Dak Mót y a la Provincia Dominica de Vietnam: “Sabemos que la voluntad de Dios es misteriosa, no podemos comprender plenamente los caminos del Señor. Sólo podemos entregar a nuestro hermano en las manos del Señor. El Padre Joseph está viajando por la eternidad y, haya pasado lo que haya pasado, nadie puede separarlo a él ni a nosotros del amor de Dios. Cuando fue agredido, el padre Joseph actuaba como Cristo, dispensando su perdón. Morir en ese momento, ‘in persona Christi’, debe ser una gracia. En este dolor vemos también la belleza y la nobleza del sacerdote”.
